Todo cambia. Y las visitas Ad Límina también. Ahora, gracias a los avances tecnológicos, prácticamente la podemos seguir en directo. Conocemos el programa, pero también, gracias a los Vicarios Generales convertidos en improvisados fotógrafos podemos seguir casi en directo los pasos que van dando nuestros pastores en Roma. Podríamos decir que es una visita Ad Límina 3.0. El sentido de la visita es el mismo. La devoción y la emoción también. Pero ahora tenemos la oportunidad de que todos los diocesanos podamos acompañar virtualmente a nuestro obispo D. Antonio.
Hoy la misa de la mañana ha sido en la Basílica de Santa María la Mayor presidida por el arzobispo de Mérida Bádajoz, D. Celso Morga. Así nos lo contaba nuestro “corresponsal” el Vicario General D. Ignacio López
En el programa de hoy, en la mañana se realizará la visita a la congregación para el clero. Ya en la tarde podrán conocer la sede del Dicasterio para la comunicación. Seguramente, allí les animarán a “contar la alegría del Evangelio” a través de las redes sociales, internet y los distintos medios de comunicación.
Algo que ya ha empezado. La realidad ha cambiado. La pasión por transmitir la buena nueva es la de siempre; Los medios para aproximarse a la realidad son distintos… pero, a pesar de todo, las ganas de acercar a Jesucristo a la gente es la misma ayer, hoy y siempre.
