
El movimiento diocesano Vida Ascendente celebró el pasado sábado 25 de octubre su Asamblea Diocesana en la Casa de Espiritualidad de Aguadulce, en un ambiente de participación, alegría y fraternidad. La jornada tuvo como objetivo profundizar en la fe, fomentar la amistad y renovar el compromiso apostólico de los mayores en la Iglesia y en la sociedad.
Según los responsables diocesanos de Vida Ascendente, fue “una jornada muy intensa, alegre y compartida, para seguir siendo útiles a la Iglesia y a la sociedad”.
El encuentro contó con la presencia del nuevo consiliario diocesano del movimiento, D. Roberto Rodríguez Espinosa, quien dirigió la oración de la mañana y presidió la Eucaristía con la que concluyó la jornada. Durante la mañana, D. José Manuel Palma ofreció una conferencia titulada “Descubriendo el Paraíso”, muy valorada por los participantes “por lo acertado de su exposición y la luz que aportó a todos los presentes”.
Asimismo, se aprobó el acta de la asamblea anterior y la nueva programación para el curso pastoral, elaborada a partir del trabajo en grupos donde los asistentes reflexionaron y realizaron aportaciones que fueron incorporadas al nuevo plan.
Entre las prioridades del curso, los responsables destacaron las actividades orientadas a paliar el edadismo, una realidad que “aún se percibe en la Iglesia y en la sociedad”, así como la lucha contra la soledad, “que el Papa Francisco ha definido como la pandemia de este siglo”.

