
El Sr. Obispo ha querido compartir el rezo público de los Dolores de la Virgen que realiza la Hermandad de la Soledad por las calles de la feligresía, hasta el cerro de S. Cristóbal -que evoca el Calvario- atravesando las calles de vecinos con precariedad económica.
Tras participar en el via crucis del Santo Cristo de la Escucha, D. Antonio Gómez Cantero se trasladó a la parroquia de Santiago Apótol. Esperó a que finalizara la veneración de la Imagen, y a su colocación en andas y emprendió el camino al lado del predicador del Septenario, D. Ramón Garrido, y del párroco, D. Francisco Escámez rodeado de unos trescientos fieles.
Diversos fieles de ambos sexos y diferentes edades leyeron las oraciones y portaron la Imagen, entonando cantos piadosos y litúrgicos. En el cerro, a la base del Monumento al Corazón del Redentor, D. Antonio dirigió una hermosa plegaria, bíblica y participada.
Este acto de piedad popular católica, de dos horas de duración aproximada, cumple 15 años coincidiendo con el 250 aniversario fundacional de la Hermandad. Los fieles se emocionaron por la cercanía del Obispo, rezando junto a ellos, en este público testimonio de fe católica y espiritualidad mariana.