Con motivo de la próxima conclusión de la fase diocesana del Sínodo, el equipo diocesano del Sínodo se reunió el pasado miércoles en la parroquia de Jesucristo Redentor. Como ya es habitual, la reunión de trabajo comenzó invocando al Espíritu Santo para que sea el artífice y guía de lo allí programado, y se puso bajo la protección de María todo el trabajo sinodal.
A continuación, trataron dos puntos principales: en primer lugar, la recepción de las síntesis sinodales de cada parroquia y el modo de proceder para la redacción de la síntesis final que recoja las inquietudes e iniciativas de toda la diócesis. En segundo lugar, se debatió sobre la preparación de la celebración conclusiva de la fase diocesana del Sínodo del próximo 23 de abril.
El equipo diocesano del sínodo vive con intensidad e ilusión estos últimos meses, y pide la colaboración de todos para que las síntesis de cada parroquia les sean enviadas lo antes posible. Es momento de firme y confiada oración, de trabajo y entrega por una Iglesia sinodal.