
El pasado domingo II de Adviento tenía lugar en la Catedral de la Encarnación la primera misa presidida por D. Antonio Gómez Cantero como obispo diocesano.
Fue una celebración sencilla en la que participó un buen número de feligreses que quisieron acompañarlo en estos primeros pasos de su episcopado. Miembros de hermandades y cofradías, acción católica, y un grupo de jóvenes se sumaron a la celebración eucarística que concluyó con la bendición del Belén situado en el trascoro del templo catedralicio.