Ayer viernes, 5 de julio, se cumplían veintidós años de la consagración episcopal de Mons. Adolfo González Montes, de los cuales diecisiete los ha dedicado a la diócesis de Almería, donde tomo posesión de la cátedra de San Indalecio el 7 de julio de 2002. La Catedral acogió a más de medio centenar del presbiterio diocesano, que se sumaron a la mayoría del Cabildo Catedral presente para concelebrar la Eucaristía con el Obispo. Se unieron los sacerdotes de las Órdenes y Congregaciones religiosas y muchas Religiosas, que se hicieron presentes al lado de miembros de las distintas hermandades y cofradías, y representantes de los apostolados operativos en la diócesis. Se unieron también a la celebración los miembros del personal auxiliar y oficiales de Curia del Obispado.
No podía faltar el Seminario, interpretando los seminaristas de la Schola Cantorum las antífonas de la Misa, dirigidas por el Maestro de Capilla. Fue un momento de acción de agracias por el ministerio del Obispo, que es un servicio a la unidad de la Iglesia diocesana, a la caridad pastoral para con los fieles, y a la obra evangelizadora de la Iglesia. Seguidamente, el presbiterio compartió con el Obispo la comida de fraternidad en el comedor de la Casa Sacerdotal San Juan de Ávila.
Ofrecemos la homilía pronunciada por el Obispo diocesano.
