Cerca de medio millar de almerienses salían a primera hora del pasado sábado 4 de mayo desde la plaza de la Catedral en dirección a Pechina, cuna de la Diócesis de Almería, lugar donde estableció San Indalecio la sede de su comunidad. «Este es uno de los momentos festivos de la celebración del V Centenario de la Catedral, yendo al origen de la Iglesia de Almería, que está en Pechina. Así repetimos lo que han hecho muchos obispos en 500 años: peregrinar a Pechina, a la sede de San Indalecio, donde empezó la fe de Almería», explicaba a las 8.30 horas de la mañana el deán de la Catedral, Juan José Martín Campos.
El acto de inauguración fue muy emotivo donde se pudieron oír palabras de aliento y de fe de Manolo Borrego, presidente de la Asociación de Scouts Católicos de Almería, de Juan Manuel López, alcalde de Pechina, de Mª del Mar López, diputada del área de recursos humanos, de Diego Martínez, coordinador del IAJ Almería, Antonio Jesús Casimiro, concejal de deportes del ayuntamiento de Almería y D. Ignacio López, vicario general y a su vez consiliario de la Asociación de Scouts Católicos Almería. También estuvieron de invitados los dos ediles Oscar Bleda y Antonio Urdiales. Todo este acto estuvo presentado por la periodista y antigua scout Lola González.
Después del acto de inauguración, tuvo lugar el pistoletazo de salida hacia el pueblo de Pechina, en pocos minutos las calles de Almería se empezaron a llenar de peregrinos, recorriendo así́ las calles por donde pasa la primera etapa del camino de Santiago Mozárabe.
La peregrinación estaba compuesta por un grupo muy variado de edades desde los más pequeños hasta los más grandes, recorriendo estos 11km que nos separan entre la catedral de nuestra diócesis y el pueblo donde tuvo lugar la primera diócesis de nuestra provincia. Todos sabían que esta peregrinación era llegar al lugar de partida de nuestra fe y no había quejas, sino palabras de aliento y esperanza entre todos los peregrinos mientras andaban y se apoyaban entre unos y otros.
Llegando al pueblo de Huércal de Almería fueron recibidos por la parroquia (con su párroco Juan Carlos Morales a la cabeza) con agua para poder hidratar a todos los peregrinos que así lo quisieran, al igual el poder entrar dentro de su parroquia, para poder rezar ante el Señor y la Virgen. Después de esta parada se siguió́ con la peregrinación hasta el pueblo de Pechina, donde todos sus vecinos se volcaron para poder repartir agua y ayuda al igual que los bomberos del poniente que refrescaron a todo peregrino después de una dura marcha bajo el sol.
De allí, se dirigieron a la abarrotada parroquia para poder celebrar la emotiva Eucaristía y escuchar la homilía de nuestro obispo Don Antonio. Al terminar la eucaristía, se trasladaron hacia el recinto ferial de Pechina donde tuvo lugar un concierto amenizado por el grupo musical Los Riscos, donde se pudo disfrutar de una barra organizada por el pueblo de Pechina, cuyos beneficios serán destinados para restaurar la parroquia de Pechina.
Fue una jornada muy emotiva y donde se pudo hacer comunidad diocesana con una idea que se repetía en todos los corrillos: “Esta peregrinación debería de convertirse en una tradición para todos los años en la diócesis”.
