
Durante los días 3 y 4 de julio, el Colegio Diocesano San Ildefonso acogió una nueva edición del Congreso del Profesorado de Religión Católica de la diócesis de Almería, bajo el lema “Corazón de Iglesia y alma de maestro”. Una convocatoria que ha vuelto a demostrar su vitalidad y arraigo, reuniendo a más de 150 docentes que imparten la asignatura de Religión en los centros educativos de la provincia.
Este encuentro, ya consolidado como un referente formativo, ha ofrecido a los participantes un espacio privilegiado para la reflexión, el intercambio de experiencias y el fortalecimiento de la vocación docente desde la perspectiva cristiana.
Las ponencias principales corrieron a cargo de D. Pablo Coronado Moreno, quien invitó a los asistentes a redescubrir su identidad como educadores cristianos y a renovar su liderazgo en el aula. Bajo los títulos “Identidad, liderazgo y acompañamiento del educador cristiano” y “Hacia la celebración de ReliCatGames Almería”, el ponente presentó propuestas inspiradoras para conectar el Evangelio con el lenguaje actual del alumnado, incluyendo una original iniciativa de olimpiadas religiosas.
Una de las aportaciones más destacadas del congreso fue la presentación de experiencias didácticas gamificadas, desarrolladas por equipos de profesores, que mostraron cómo es posible aplicar metodologías activas al currículo de Religión. Entre ellas, destacaron proyectos como “Los ídolos de la fe”, “¿Quién es quién? en la Pasión de Jesús” y “Vivos”, que apuestan por una enseñanza participativa, creativa y profundamente evangelizadora.
En la jornada del jueves, Dña. Rosa María Fernández, directora de la Oficina Diocesana para la Protección del Menor, abordó un tema de gran relevancia: la creación de entornos seguros. Presentó el Protocolo de prevención ante abusos y subrayó la necesidad de cuidar especialmente el ámbito educativo como espacio protector.
El congreso concluyó con un emotivo acto de homenaje a los profesores que se han jubilado durante el curso, agradeciéndoles su entrega y su testimonio de fe a lo largo de los años.
La Delegación Episcopal de Enseñanza expresó su gratitud a todos los participantes por su implicación, y renovó su compromiso de seguir acompañando al profesorado en su misión evangelizadora. Como recordaba el Papa Francisco, la clase de Religión es “una oportunidad para el diálogo entre la fe y la cultura”.