Un año más somos convocados a orar por la Unidad de los Cristianos. Desde que en 1908 Paul Watson, episcopaliano estadounidense, comenzara el Octavario por la Unidad de la Iglesia, viene celebrándose entre las festividades de la Confesión de san Pedro y la de la Conversión de san Pablo, del 18 al 25 de enero, la SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS.
El trabajo ecuménico es, ante todo, oración. El delegado episcopal de ecumenismo, D. Juan Torrecillas Cano nos anima a todas las parroquias, comunidades, grupos, colegios católicos y demás asociaciones de la Iglesia a orar insistentemente por esta intención. La unidad es sobre todo un don, un regalo de Dios. Nuestro Obispo, siguiendo el sentir de la Iglesia Universal, nos recuerda este deber de todos los cristianos. La Semana culminará con un ACTO DE ORACIÓN ECUMÉNICA, en la Santa y Apostólica Iglesia Catedral. Cantaremos las Vísperas de la Fiesta de la Conversión de san Pablo. Será el próximo día 25, enero, 2016, lunes; a las 19´30 h.
Durante una semana, el corazón de los cristianos de todas las confesiones se eleva de manera unánime a Dios para orar por la unidad. Las congregaciones y parroquias de todo el mundo organizan encuentros y celebraciones ecuménicas que se convierten en auténticos «oasis de reconciliación», en los que se festeja la unidad ya real, aunque todavía no plena, entre los cristianos.
Bajo el lema «Destinados a proclamar las grandezas del Señor» (1Pe 2,9) todos los cristianos de nuestra diócesis estamos invitados a dar un testimonio de unidad frente a un mundo que se resquebraja por la división, el fundamentalismo, la violencia y la guerra. Hoy, más que nunca, la Iglesia de Cristo ha de ser constructora de puentes de entendimiento, de cauces de reconciliación y poner en juego todos los instrumentos necesarios para hacer posible la paz entre los pueblos.
