La población del levante almeriense de Huércal-Overa celebra en el día de hoy la tradicional “Noche de las Lumbres”, conmemorando el 269 aniversario del traslado de la antigua parroquia, ubicada en la carretera nacional 340, hasta el templo actual consagrado a Nuestra Señora de la Asunción, patrona de la villa.
Cada año 8 de febrero, las calles y plazas del pueblo se iluminan con las llamas de los fuegos, recordando las lumbres que los huercalenses encendieron en 1739 de forma espontánea, con el fin de que el Santísimo no estuviese en penumbra durante su traslado de la antigua parroquia hasta el templo actual de Nuestra Señora de La Asunción.
Desde entonces, los vecinos, unidos por barrios y peñas, dedican varios días a recopilar leña que arderá para rememorar la histórica procesión de Cristo Sacramentado.