Este verano, las fiestas patronales de Fuente Victoria, en honor de la Reina de los Ángeles y el Santo Cristo del Consuelo, han tenido un tinte especial, ya que los feligreses de esta población de la Alpujarra almeriense se volvieron a unir, una vez más, para conseguir el dinero necesario con el que sufragar los gastos de restauración de la talla del Cristo, la cual no ha recibido ningún tipo de tratamiento desde finales de los 80. Por aquel entonces, la intervención costó 95.000 de las antiguas pesetas.
Si tenemos en cuenta de que hablamos de una población que no supera los doscientos habitantes, el hecho de que hayan conseguido la cantidad de casi 5.000 euros en los dos días de las fiestas patronales es un dato más que sobresaliente, puesto que se pone de manifiesto la unión que propicia la fe y la piedad centenaria de esta villa.
En esta ocasión, la venerada imagen será objeto de un proceso de restauración más completo que incluirá tanto la recuperación de la policromía como la tonalidad original que lucía en antaño, además de acometer los numerosos desconchones y grietas que presenta la talla de madera.
Por eso, este año, como novedad, al concluir la procesión en la que el Cristo del Consuelo acompaña a la Reina de los Ángeles hasta su ermita, la imagen no ha vuelto a su hornacina en la iglesia de la Encarnación, sino que ha quedado presidiendo desde sus antiguas andas el templo hasta su marcha, en el mes de septiembre.
De ahí que, a modo de despedida, los fieles que se dieron tras la procesión en la parroquia pudieron participar en el besapiés presidido por el párroco de Fuente Victoria, junto con los miembros de la Hermandad de la Reina de los Ángeles.
