El Obispo visitaba el pasado sábado 27 de enero la residencia de las Hermanitas de los ancianos Desamparados para presidir la santa Misa, con la que se clausura el triduo de acción de gracias del 175º Aniversario del nacimiento de la Fundadora de esta Congregación, Santa Teresa de Jesús Jornet, nacida el 9 de enero de 1943 en Aitona (Lérida) y fallecida el 26 de agosto 1897 en Valencia. Fue beatificada el 27 de abril de 1958 por el Venerable Papa Pío XII y canonizada el 27 de enero de 1974 por el Beato Papa Pablo VI. La fiesta de santa Teresa de Jesús Jornet se celebra el 26 de agosto, día de su fallecimiento o “dies natalis”, es decir, día de su nacimiento para el cielo.
Las Hermanitas tienen casas y residencias en 19 países y su servicio es profundamente estimado. Su secreto es la honda fe y la caridad de la que son un testimonio evangélico vivo. La capilla que convocaba a todos a la acción de gracias eucarística estaba abarrotada de residentes y familiares, a los que se sumaron para concelebrar con el Obispo de Almería un buen número de sacerdotes con el Vicario de la Ciudad D. Juan Torrecillas Cano. No faltó un coro, esta vez el de la capellanía del Cuartel de la Comandancia de la Guardia Civil de la Capital, que ya han actuado como voluntarios de ayuda en la residencia de las Hermanitas. Otras agrupaciones se hicieron asimismo presentes, sin que faltaran algunos miembros de la Corporación municipal.
La efeméride coincide con el 145º Aniversario de la fundación de esta Congregación religiosa, fundada por la Santa en 1873, con la ayuda del Fundador, el sacerdote Don Saturnino López Novoa, nacido en Sigüenza el 29 de noviembre de 1830, muerto el 5 de marzo de 1905. Fue formador del Seminario de Barbastro y Secretario de Cámara y Gobierno en Huesca, redactando los estatutos de algunas congregaciones nacientes en la segunda mitad del siglo XIX. Canónigo Chantre de la catedral de Huesca, conoció el destierro durante el período anticlerical de la revolución de 1868. Su inmensa caridad le llevó a proveer de bienes a pobres e instituciones. Doctor en Teología, historiador eclesiástico y maestro de oratoria sagrada, Don Saturnino fue con Santa Teresa de Jesús Jornet exponente de la caridad y sensibilidad social ejemplares que inspiró la renovación del catolicismo hispano del siglo XIX.
