
En la mañana del 1 de julio, una quincena de aspirantes a ministros de la celebración dominical y festiva en espera de presbítero, debidamente presentados por sus párrocos, se dieron cita en la casa de espiritualidad “Reina y Señora” de Aguadulce para recibir el curso de formación antes de obtener las debidas licencias por parte del Obispo diocesano.
La primera de las ponencias corrió a cargo del delegado de liturgia de la Diócesis, D. Samuel Olvera Olivares, que detenidamente expuso importancia de celebrar el día del Señor en comunidad y el sentido pastoral de estas celebraciones cuando no hay ministro ordenado.
Tras un breve descanso y un café, comenzó la segunda de las ponencias impartida por el diácono, D. Manuel Jesús Piedra Giménez, que versó sobre la estructura y desarrollo de las celebraciones de la Palabra en un sentido práctico, siguiendo el nuevo directorio editado por CEE.
El encuentro terminó con la foto de familia y la comida compartida en la que se dejaba ver entre los aspirantes la ilusión por esta nueva misión que pronto emprenderán y que la Iglesia les confía.