Los jóvenes de la parroquia de san Francisco Javier en Palomares han podido disfrutar este fin de semana de un tiempo de esparcimiento en la Parroquia del Carmen de Aguadulce.
Animados por su párroco y su catequista han tenido tiempo para la oración y la formación cristiana. También pudieron disfrutar del ambiente de esta localidad costera y la calurosa recepción de la comunidad parroquial.
Estos momentos de convivencia son realmente necesarios para el crecimiento en las virtudes cristianas, así como para estrechar lazos entre ellos.