El pasado 30 de junio se celebró sesión del Consejo diocesano de Cáritas, en la sede de los Servicios generales de la entidad. Bajo la Presidencia del Obispo, Mons. González Montes, contando con la presencia del Vicario para la Acción caritativa y social de la Iglesia y Delegado Episcopal en Cáritas, D. Manuel Antonio Menchón Domínguez.
En dicha sesión, fue aprobado el Balance y Cuentas Anuales del ejercicio 2008 y, con la Memoria Económica, fue presentada al Obispo y a los Consejeros la Memoria Anual de Actividades, con los resultados de los Proyectos y Programas de Acción Social aplicados durante el año, tanto en los Servicios generales como en las parroquias con delegaciones de Cáritas constituidas.
La Memoria aborda un detenido estudio comparativo del último bienio, con el que se trata de facilitar el análisis acerca de la incidencia de la crisis económica en el resultado de las atenciones demandadas y las ayudas prestadas, entre 2007 y 2008.
Aumento del número de personas atentidas y de atenciones básicas
Como en toda España, también en Almería esto se ha detectado y hecho notar por la acción de Cáritas. El aumento de las atenciones básicas requeridas en 2008, oscila entre el +23,72% (detectado a través de la aplicación de Proyectos de Atención Integral en los Servicios generales) y el +79,26% (detectado a través de los Servicios de Acogida de las Cáritas Parroquiales.
El aumento del número de demandantes de ayuda convierte el incremento global apreciado en esta diócesis en un 45,17% más de personas atendidas que en 2007, mientras que el aumento medio recogido por Cáritas Española de las 68 Cáritas diocesanas de la Confederación, alcanza el 50% sobre los beneficiarios de Atenciones básicas en 2007
Los datos de las Cáritas parroquiales de esta diócesis se han podido ponderar sólo con los datos de un 52% de las 72 constituidas.
Descenso de las ayudas públicas
A tenor de las causas analizadas, quedó explicado que el ejercicio económico se haya cerrado en Cáritas con déficit, pese a que, en el monto proveniente de fondos propios (donativos y colectas) se observa algún aumento respecto al año anterior (el 3,32% en los Servicios generales y un 11,07% respecto al año anterior).).
Para proporcionar sus ayudas, Cáritas cuenta, principalmente, con los donativos individuales y colectas a este fin. Se ha sumado la ayuda diocesana a través de la Conferencia Episcopal Española y se añade un escaso porcentaje de subvenciones públicas para cuatro proyectos en funcionamiento a través de los Servicios generales, comportando éstas un 22,58% de los ingresos).
Con relación a años anteriores se ha producido un importante descenso de las ayudas públicas, que, en el caso de los proyectos diocesanos resultan exclusivamente provenientes de la Delegación Provincial de la Consejería de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía (un total de 40.000 €) y con cargo al IRPF, a través del Ministerio correspondiente (24.850,79€).
Hay que añadir que, en cuanto a las Cáritas Parroquiales, sólo se ha podido consignar la ayuda de un Ayuntamiento de la provincia. En medio de las dificultades que vivimos junto a los más afectados por esta conocida situación de crisis, Cáritas demanda acciones adecuadas a los poderes públicos, a la vez que pone en ejercicio las posibilidades con las que cuenta, sobre todo: el amor cristiano y la solidaria generosidad de toda la sociedad almeriense, que acerca sostenimiento a los que sufren los peores efectos de carencia material.
