En este Año Jubilar del Rocío, a petición de la Hermandad Matriz de Almonte, el Secretariado de Pastoral Juvenil, junto con las distintas coordinadoras arciprestales de juventud, han decidido ofrecer a los Jóvenes de nuestra Diócesis ganar el Jubileo Mariano en lugar de nuestra tradicional Vigilia Diocesana de la Inmaculada en una Peregrinación Diocesana de Jóvenes con motivo de la fiesta de la Inmaculada.
La programación para el día 7 de diciembre será la siguiente:
-21.00 horas: acogida en la Casa de la Cultura de Almonte
-21.30 horas: celebración comunitaria del sacramento de la Reconciliación (con confesión individual) presidida por el Sr. Obispo.
-23.00 horas: celebración de la Eucaristía a los pies de la Blanca Paloma presidida por el Sr. Obispo.
Se facilitará una breve catequesis a modo de preparación al sacramento de la Reconciliación para realizarla en los autobuses en el traslado desde los lugares de origen de los peregrinos.
Por otro lado, ya el sábado 8 de diciembre, Solemnidad de María en su Misterio de la Inmaculada Concepción, patrona de nuestra diócesis, la Santa Iglesia Catedral acogerá, a las 12’00 del mediodía, la celebración de la Santa Misa de Pontifical, presidida por nuestro obispo, José Vilaplana Blasco.
La devoción concepcionista en la diócesis de Huelva es antigua, y quedan testimonios de la misma, ya sea en las representaciones que de la Santísima Virgen existen, en este Misterio de su Inmaculada Concepción, ya sea en los documentos de sus archivos diocesano, parroquiales e incluso municipales.Varias parroquias llevan a la Purísima Concepción como Titular: dos de ellas en justa correspondencia con el nombre de los lugares: Corteconcepción y Mina Concepción. El resto en Villanueva de los Castillejos, Galaroza, Zufre y Huelva, donde pasa por ser uno de los templos más antiguos erigidos en honor de este Misterio, en 1515.
Del Caballero de Arpino es el lienzo de la Inmaculada de Lepe, del círculo de Alonso Cano es la tierna imagen de la Purísima de Bonares, y de Juan Bautista Patrone (1798) la que preside la Parroquia de Galaroza. Son una muestra de los bellísimos simulacros inmaculistas de los siglos XVI al XX, algunos de ellos de buenos autores (Felipe Martínez, José de Medinilla, Orce, Sebastián Santos, Buiza…), ante los que ha brotado miles de veces el saludo de los fieles: ¡Ave María Purísma. Sin pecado concebida!
El voto concepcionista precedió al del patronazgo de la Virgen del Rocío sobre Almonte. Dicho voto era pronunciado, antes de ser dogma de fe, por otros muchos cabildos municipales de la actual diócesis onubense, por las hermandades, por los Carmelitas de San Juan del Puerto, que lo unían ya en el siglo XVII a los votos de pobreza, castidad y obediencia. La fiesta de las «gamonitas» en Bollullos par del Condado, o en Rociana, o las hogueras en Corteconcepción, expresan la fe concepcionista de la gente de esta diócesis onubense, que grita su fervor mariano en el triunfo de la Inmaculada en la capital, de Elías Rodríguez Picón, cuya reproducción acompañó al beato Juan Pablo II en una de su última convalecencia hospitalaria. La solemnidad de la Inmaculada Concepción, Patrona principal de la Diócesis de Huelva, y de su Seminario, es la fiesta íntima de los devotos de María, el reflejo de lo que la Iglesia ha de ser: Limpia, Sin Mancha. Campanas, fuego, canciones que resuenan en nuestros oídos: «Eres más pura que el sol, más hermosa que las perlas que ocultan los mares. Ella sola, entre tantos mortales, del pecado de Adán se libró». Azul de nuestro Atlántico y de los esteros de la ría de Huelva, y blanco-plata de los amaneceres de la sierra son el manto de nuestra Madre, de la Inmaculada, de María, la bendita en su Pura Concepción.