El pasado sábado 25 de agosto, la imagen de María Santísima de la Cabeza de Ronda retornó a su templo tras permanecer en la ermita rupestre de las Cuevas de San Antón desde el domingo de la Santísima Trinidad.
Según narra la nota de prensa remitida por la Hermandad, este acontecimiento tuvo históricamente «mucha relevancia en la Ciudad, transcurría, hasta la actual reorganización de la Hermandad, durante la primavera, tiempo en el que se trasladaba a Nuestra Señora desde la Ermita hasta el convento de Santa Isabel de los Ángeles (Hnas. Clarisas), para posteriormente, tras la novena, volver a su ermita. Entonces, los componentes de la Corporación Municipal, así como el clero, autoridades y el pueblo, acudían a la Pila de Doña Gaspara a recibir a la copatrona de Ronda».
El acto –continúa la nota– «comenzó con la celebración de la Eucaristía a las 18:30 h en las Cuevas. Posteriormente se inició el solemne traslado y la llegada a la Pila se produjo sobre las 20.30 horas, posteriormente continuaron en procesión hasta Santa María de la Encarnación donde descansará en su altar hasta el próximo Domingo de la Santísima Trinidad».
El Día de la Asunción de la Virgen, el pasado 15 de agosto, fue otro día grande para los devotos de la Virgen de la Cabeza. Como nos cuentan desde la hermandad, «Con un numeroso grupo de hermanos y fieles, dimos comienzo a la celebración con el Vialucis (Camino de la Luz), en el que se relatan episodios gloriosos de la vida de la Santísima Virgen; su desarrollo tuvo lugar en nuestro particular camino de la luz desde los pinos hasta la ermita de la Cabeza, posteriormente en la Eucaristía, nuestros Hermanos Fray Juanjo Rodriguez y Fray José Luis Gavarrón, resaltaron la bondad del lugar para acercarse a la oración y agradecieron la piedad con la que la Hermandad celebra la Fiesta en la que la Virgen fue llevada en cuerpo y alma al Cielo.Tras los saludos y vivas de rigor, se conmemoró la fiesta en el interior de la iglesia rupestre, compartiendo el ágape que cada una había traído. La Hermandad, agradece a los asistentes su devoción a la Virgen».
