Será enterrada el lunes 26 de septiembre en Guadix, de donde era natural. El Obispo accitano presidirá las exequias.
El domingo 25 de septiembre, en Granada, ha fallecido la madre Encarnación Cruz Olivencia, religiosa de la Presentación de la Virgen María. Tenía 83 años y hasta el año pasado ha mantenido una actividad importante en tareas administrativas de la Institución. En concreto, durante casi 20 años, Madre Encarnación ha llevado la administración económica de la Institución, un trabajo que dejó hace poco más de un año.
Madre Encarnación, que era natural de Guadix, ha estado en diferentes comunidades, algunas en el extranjero como cuando fue a Venezuela, donde estuvo varios años. También fue delegada en Uruguay. Ya en España, estuvo destinada en la casa de Málaga y de allí marchó a Granada para llevar la administración económica de las Religiosas de La Presentación.
La exequias, que serán a las 10 de la mañana, tendrán lugar el lunes 26 de septiembre en Guadix, en la Iglesia de la Virgen de las Angustias, que está adosada al centro que las Religiosas de La Presentación tienen en la ciudad accitana. La celebración estará presidida por el obispo de Guadix, Mons. Ginés García. Después recibirá sepultura en la ciudad que la vio nacer.
Las religiosas de La Presentación tienen dos colegios en la diócesis de Guadix: uno en Baza y otro en Guadix. También tienen casas en Granada, Málaga, Linares, Madrid. Fuera de España, están en Méjico, en Colombia, en Venezuela, en Uruguay y en Argentina. En España son conocidas, sobre todo, por su labor educativa y sus colegios, donde se forman miles de jóvenes.
La Presentación
La Congregación de Hermanas de la Presentación de la Virgen María, de Granada, fue fundada en la ciudad de Granada ,el día 12 de Octubre de 1.880 por Maximiano Fernández del Rincón y Soto-Dávila, sacerdote de Jaén , canónico lectoral de la Catedral de Granada, quien contó con la colaboración de la madre Teresa de la Asunción Martínez y Galindo, monja clarisa del convento de San Antonio, de Baeza, que imprimió en la Congregación el espíritu de contemplación, sencillez y pobreza.
Las Religiosas de la Presentación, movidas por el mismo Espíritu que inspiró a sus Fundadores, tratan de seguir su misión en una generosa entrega y disponibilidad a la Iglesia, optando por la evangelización de la cultura y transmisión de la fe, por una dedicación preferencial a los pobres y una particular atención a las familias y a los jóvenes.
En su misión estas religiosas tratan de dar una formación integral que abarque la totalidad de la persona. En sus obras se esfuerzan por crear un ambiente de sencillez y acogida a todos; por abrir cauces para la valoración de la vida, de la conciencia moral, la responsabilidad y el compromiso concreto ante los problemas sociales; forman para el reconocimiento de la dignidad humana, para una acción positiva a favor de la justicia, la paz, el pluralismo, la conciencia crítica frente a los medios de comunicación;… y todo esto desde una educación para el diálogo y la participación en la vida pública.
