El funeral de exequias ha sido presidido por el prelado accitano, D. Ginés García y concelebrado por el cardenal emérito de Sevilla y los arzobispos de Granada, de Sevilla y de Toledo.
Guadix despidió la tarde del lunes 14 de marzo a su obispo emérito D. Juan García-Santacruz. Y lo ha hecho con una emotiva celebración de la Eucaristía, en un funeral de exequias que ha presidido el prelado accitano, D. Ginés García. La catedral estaba a rebosar y los accitanos han llenado de calor el recinto y han vivido con solemnidad la celebración, hasta que al final han roto en un sentido aplauso al que ha sido su pastor durante algo más de 17 años.
El funeral de exequias por D. Juan ha tenido lugar a las 5 de la tarde y han concelebrado con el obispo accitano el cardenal emérito de Sevilla y los arzobispos de Granada –que es el metropolitano- , de Sevilla y el de Toledo. También había ocho obispos más, entre ellos los predecesores de D. Juan en la diócesis de Guadix: D. Ignacio Noguer y D. Antonio Dorado, que son obispos eméritos de Huelva y Málaga respectivamente.
También estaban el alcalde de Guadix y los de otras localidades de la diócesis y algunos otros representantes de instituciones civiles y culturales, tanto de Granada como de Toledo. En la ciudad de Guadix, su Ayuntamiento ha decretado tres días de luto y las banderas ondean a media asta.
Pero, sobre todo, había personas normales, sencillas, feligreses de las parroquias de la diócesis de Guadix, que han querido acompañar en su despedida a quien ha sido un obispo cercano, sencillo, atento y que se ha sentido siempre de esta tierra.
Comenzó el funeral con una breve semblanza de D. Juan y de su actividad pastoral. Después, el obispo de Guadix, en la homilía destacó otras virtudes de D. Juan, entre ellas su dedicación al Seminario y su preocupación por las vocaciones.
También comento D. Ginés que “el desvelo por la situación de los hijos de esta tierra marcó su ministerio. Que se acabara la pobreza y todo de marginación era su preocupación. Para esto había que potenciar la presencia y acción caritativa de la Iglesia”. Buena muestra de ello –dijo el prelado accitano- son las obras emprendidas o promocionadas por D. Juan: las Cáritas, el hogar del transeúnte, la residencia de ancianos de Huéneja y su tan querido Proyecto Hombre.
Y también destacó D. Ginés de su predecesor D. Juan “su gran sensibilidad cultural. La promoción de nuestro patrimonio, hacer de él un medio de evangelización, han sido una preocupación en su pontificado. El museo de la Catedral; el apoyo y promoción del Centro de Estudios Pedro Suárez y su amor a la música son la muestra de su buen hacer”.
El cuerpo del obispo emérito de Guadix, D. Juan-García-Santacruz, descansa ya en la catedral de accitana, en el suelo de la capilla del Cristo de Burgos, respondiendo así a la tradición de enterrar en su catedral a los obispos fallecidos. Y D. Juan, que se jubiló siendo obispo de esta ciudad, aunque emérito, permaneció y permanecerá para siempre como obispo de Guadix y, desde este lunes 14 de marzo, en su catedral.
