El joven de 15 años beneficiado por el equipamiento sufre su incapacidad desde el nacimiento aunque ahora ve mejoradas sus posibilidades de movilidad.
La Iglesia diocesana ha abordado, por impulso del obispo monseñor Mazuelos e iniciativa de la parroquia de Nuestra Señora de la Victoria de La Ina, la instalación de un ascensor especial en el núcleo rural de La Greduela. Se trata de un equipamiento puesto al servicio de un joven de 15 años de edad que sufre parálisis cerebral desde su nacimiento y, hasta el momento, había tenido reducidas a la mínima expresión sus posibilidades de movilidad.
Fue inaugurado el pasado sábado, a las 12 del mediodía, en un acto sencillo que, en esta barriada rural, presidió el pastor de Asidonia-Jerez acompañado por el sacerdote Antonio Labrador, párroco de la zona. Se encuentra en una vivienda de La Greduela ubicada junto a la capilla de Nuestra Señora de la Caridad, templo de este apartado nucleo de población ante el que se reunirán los pobladores del lugar y cuantas personas deseen acudir.
Sergio Aldón, chico afectado por esa incapacidad, había contado con visitas al médico y presencias en la escuela especial del casco urbano de Jerez a la que acude muy marcadas por una inmovilidad acrecentada por la estancia familiar en una primera planta desde la que, a medida que ha crecido, se ha hecho más complicado el descenso para tomar el vehículo con el que ha venido siendo llevado a la ciudad para que sea atendido.
El obispo, quien en su aún corto pastoreo diocesano ya había estado dos veces en la barriada rural para celebrar la Eucaristía y conocer la realidad de esa enclave de la ribera del Guadalete, puso en alerta de la situación que vive el joven y activó los dispositivos eclesiales habituales para poner fin a esta situación. Fruto de sus gestiones, el elevador fue instalado siéndole colocada, además, una caja exterior necesaria dadas las características de la vivienda.
