En Roquetas de Mar.
El martes pasado, 14 de diciembre y fiesta de san Juan de la Cruz, el Ayuntamiento de Roquetas de Mar entregaba el Escudo de Oro de la ciudad al Obispo de Almería, Mons. Adolfo González Montes, aprovechando la ocasión que le brindaba a la corporación roquetera la visita pastoral que el Obispo diocesano viene cursando a las parroquias del municipio. Las últimas semanas esta visita le caía en suerte a la parroquia de Nuestra Señora del Rosario, la comunidad cristiana matriz de la más amplia red de comunidades cristianas surgidas a su amparo.
Como es habitual en las visitas pastorales canónicas, el Obispo de Almería cursa siempre una visita institucional a la Corporación municipal. La visita al Ayuntamiento de Roquetas fue programada de esta forma, pero la Corporación aprovechó la ocasión para la entrega del escudo de oro en acto público, al que se sumaron representantes de los tres partidos que componen la Corporación: populares, socialistas y el INDAPA.
El decreto motivado por el que concede esta distinción al Prelado almeriense argumenta aludiendo a la presencia activa de la Iglesia Católica en la sociedad roquetera, a la actividad pastoral del Obispo y a su presencia en Roquetas para alentar la construcción de nuevos templos, que gracias a este impulso episcopal van modificando el tejido de iglesias y servicios pastorales en Roquetas: dos nuevas iglesias parroquiales construidas, se ha puesto la primera piedra de la nueva parroquia de la Preciosísima Sangre, cuyas obras están a punto de empezar, y ya se está eleborando el proyecto para una nueva iglesia para la Urba, ahora servida al aire libre por el recinto de la Virgen de los Vientos.
Destaca en el decreto la valoración que la Corporación hace de “la extraordinaria capacidad de conciliación y mediación en las relaciones ciudadanas” que se reconoce en el Obispo de Almería y motiva la concesión de esta distinción de honor.
La corporación recibió al Obispo Almeriense a la entrada del Ayuntamiento y después de una breve visita a algunas dependencias de la Casa Consistorial, dio comienzo el acto público, al que se sumaron los sacerdotes de con destino pastoral en el municipio y un buen número de personas que quisieron estar presentes en la entrega de la distinción al Obispos. Después de la intervención en el acto de Gabriel Amat Ayllón, Alcalde de Roquetas, Mons. González Montes agradeció calurosamente la distinción del Ayuntamiento roquetero y de su Alcalde, refiriéndose además a su voluntad de entendimiento y colaboración con las instancias civiles, en el contexto constitucional que habla de la colaboración de estas con la Iglesia Católica y las otras confesiones religiosas.
El Obispo describió la aportación de la religión y de la Iglesia a la sociedad, su condición de mayoría entre los grupos sociales que forman el tejido social y de la labor caritativa y social, cultural, sanitaria y educativa que viene secularmente realizando la Iglesia, fiel a su servicio a la persona y a su dignidad.
Después del acto público celebrado en el Ayuntamiento, el Obispo se trasladó con el Alcalde y algunos concejales y personas asistentes al acto al castillo de Santa Ana, para proceder a la bendición del gran Belén instalado en el patio de la fortificación.