“CONDUCE CON CORTESÍA EN
Mis queridos diocesanos:
La Iglesia en España celebra el primer domingo de julio la Jornada de Responsabilidad en el Tráfico con el siguiente lema: “Conduce con cortesía en la carretera y en la vida”. Este lema nos invita, ante todo, a valorar la persona, poniéndola por encima de cualquier tipo de intereses personales o comerciales
1. Responsabilidad en el tráfico
Esta jornada es una llamada a la reflexión personal y una invitación a la plegaria en nuestras comunidades cristianas para lograr un tráfico cada vez más fluido. La Iglesia, al servicio de la persona humana, quiere colaborar también con otras instituciones públicas y privadas en este campo.
2. Buena noticia
De ordinario, nos llegan noticias tristes sobre el tráfico rodado: accidentes mortales, atascos, retenciones o circulaciones lentas, etc.
Recientemente se ha hecho pública una buena noticia que nos ha llenado de alegría. El año
No obstante, aún sigue siendo alarmante las cifras de muertos en accidentes de carretera en el año 2004: más de
3. Conduce con cortesía
La cortesía en carretera debe ser un aspecto concreto del comportamiento diario. Tanto en el tráfico como en otros aspectos de la convivencia humana, la cortesía conlleva amabilidad en el trato, respeto a los demás, buenos modales, comprensión y afabilidad.
La cortesía en el tráfico se puede manifestar de muchas maneras: ceder el paso e indicar con señales que se puede o no adelantar; saber disculpar las indiscreciones o imprudencias de otros conductores; respetar de un modo especial a los niños, personas mayores o personas discapacitadas en las vías públicas. Pero, sobre todo, ser amables y cortés con todos.
4. Si conduces, sé cortés
Si conduces, ten en cuenta algunos principios básicos de cortesía y trata de aplicarlos a las circunstancias del tráfico en carretera: controla las prisas imprudentes; reprime el espíritu aventurero y competitivo; mantén un ambiente distendido dentro del vehículo, cuando se viaja en compañía de familiares u otras personas; domina los nervios y ten paciencia en los atascos o circulaciones lentas; sé muy comprensivo y amable con los profesionales del volante y demuestra tu gratitud a cuantos nos sirven y ayudan en carretera. La cortesía bien entendida y practicada en carretera es expresión de un corazón noble, caritativo y agradecido. Si conduces, sé cortés.
5. Oración apostólica
Os invito, pues, en esta Jornada de responsabilidad en el tráfico a elevar una oración a Dios Padre, por todos los profesionales de la carretera, a los servidores del tráfico, a las autoridades encargadas de ofrecer a los ciudadanos carreteras más seguras y de regular con normas sabias, los crecientes problemas de la circulación y a cuantos se dedican a educar y ayudar a las personas relacionadas con este complejo mundo. ¡Que San Cristóbal, patrón de los automovilistas, nos acompañe!
Reza por vosotros, os quiere y bendice,
+ Antonio Ceballos Atienza
Obispo de Cádiz y Ceuta
Cádiz, 27 de junio de 2005.