Array

Martos celebra las Bodas de Diamante Sacerdotales de dos presbíteros

“…Sé fiel hasta el final, y yo tu Dios te daré la corona de la vida…” (Ap 2, 10).
El pasado domingo, 30 de junio celebramos en nuestra Parroquia de la Asunción de Martos, un acontecimiento un tanto inusual, pero muy importante y ungido para toda la Iglesia de Martos: Las bodas de Diamante sacerdotales (60 años de ministerio sacerdotal) de D. Francisco Pérez Pinel y D. Gabriel Susí Lara.
El sencillo y moderno Templo de la Asunción de Martos se llenó de familiares, amigos y feligreses de distintas comunidades cristianas por las que estos dos sacerdotes han vivido, y se han entregado como pastores fieles del pueblo de Dios.
Un buen número de sacerdotes amigos de los homenajeados, concelebraron la Eucaristía en la que D. Francisco Pérez Pinel, con sus 86 años, desde su limitación y enfermedad, dio fiel testimonio de su sacerdocio en la debilidad, y hasta el final. Su rostro, sin apenas palabras, irradiaba alegría y gozo, y se sentía querido, arropado y valorado.
D. Gabriel Susí, que actualmente a sus 84 años colabora en esta Parroquia de la Asunción, presidió la Santa Misa con unción, y mucho cariño hacia su compañero y hermano, D. Francisco, valorando el ministerio sacerdotal después de 60 años como fuente de felicidad y entrega al Señor.
La vida de los dos es, desde luego, la mejor prueba de que es verdad y realidad, que el sacerdocio es un don precioso y una fuente de felicidad y gozo en la Iglesia del Señor. Su paso por muchas comunidades cristianas y el servicio en distintos cargos y ministerios a lo largo de su vida, su buen hacer y su mejor servir, es la mejor prueba de que la vida de estos dos sacerdotes ancianos, todavía sirviendo en aquello que pueden, es el mejor manual sobre el Sacramento del Sacerdocio.
Moniciones, lecturas, Acción de gracias, peticiones…etc realizadas por familiares, amigos y feligreses revistieron a la Eucaristía de ese domingo de una emoción especial en cada gesto, en cada ofrenda, y en cada palabra.
En el Ministerio de la Música, el Coro Musicorun de Martos, que dirigido por D. Joaquín Marchal, llenaron la celebración de piedad y armonía.
Al terminar la celebración D. Gabriel quiso después de 60 año de vida sacerdotal, cantar y mirar a la Virgen María que “ha sido siempre Madre de los sacerdotes”. Y el pueblo de Dios bendijo al Señor, por la vida de estos dos sencillos, pero muy queridos sacerdotes de la Diócesis de Jaén.
El Obispo de Jaén, Don Amadeo Rodríguez Magro, mandó una emotiva carta a los dos sacerdotes homenajeados, resaltando el privilegio que suponía para él y para la Diócesis de Jaén el poder contar con la trayectoria y el ministerio de estos dos sacerdotes.
Y al final “la Fiesta”: toda la feligresía compartió una animada verbena parroquial donde los homenajeados pudieron sentir el gozo y el cariño de muchos.
Unas emotivas palabras finales del párroco dando gracias a Dios por el don del sacerdocio y por la vida de los dos sacerdotes, puso punto y final a una tarde noche llena de vida, fidelidad, entrega y servicio.

Que Dios los bendiga.

Jesús Marchal Urbano
Feligrés de la Parroquia de la Asunción

Contenido relacionado

ITD reivindica que la dignidad de la persona esté en el centro de las...

La realidad laboral en España es preocupante. El desempleo estructural, la...

EL AMOR PRIMERO, por Antonio Gómez Cantero

Sus padres no sabían qué le podía estar pasando. Estaba sin...

Enlaces de interés