Un grupo de 130 personas, de la Parroquia de la Natividad de Jamilena, peregrinaron a Jaén, el día 1 de mayo, para venerar la sagrada reliquia que se conserva en la Catedral de Jaén: el Santo Rostro.
La peregrinación se encuentra entre las actividades organizadas por la parroquia en este año de la misión; una propuesta que responde también a la intención de revitalizar una tradición perdida en Jamilena y en tantos pueblos limítrofes a la capital giennense: ir caminado a Jaén los viernes para venerar la sagrada imagen.
El hecho de ir andando a encontrarse con el gran tesoro de nuestra devoción animó a adultos, jóvenes y niños a recorrer el trayecto que separa a Jamilena de Jaén. El trazado que se siguió fue el señalado actualmente como Camino de Santiago Mozárabe, aunque desviándose un poco de la ruta antes de llegar a la capital, para entrar por la falda del Castillo de Santa Catalina y poder así disfrutar de la maravillosa sierra y la vista que ofrece ese camino.
Con un cierto retraso con respecto a la hora prevista de llegada, se formaron dos grupos para venerar el Santo Rostro y después hacer la visita guiada a la Santa Iglesia Catedral. El canónigo encargado de la custodia del Santo Rostro, D. José López Chica, recibió amablemente a los grupos de peregrinos y los invitó a hacer una breve oración antes de impartir la bendición y dar a besar la imagen de Cristo. Al terminar, los guías acompañaron a los peregrinos a visitar la Catedral, lo que supuso un gran descubrimiento para muchos. De manera que se corroboró algo que ocurre con frecuencia: los tesoros más cercanos son los más desconocidos.
La peregrinación concluyó con una foto de grupo delante de la fachada de la Catedral, convencidos de la necesidad de seguir caminando, como parroquia, y con el deseo de repetir la experiencia.
