Del 27 de junio al 1 de julio, fueron llevados por los miembros de la Hospitalidad de Lourdes de la Diócesis y tutelados por la de Toledo. El Obispo estuvo presente en la peregrinación.
La peregrinación diocesana de enfermos a Lourdes se inició el pasado 27 de junio con la participación de una treintena de enfermos, acompañados por la Hospitalidad cordobesa de Lourdes. Una iniciativa de la Pastoral de la Salud que como señalaba el responsable de la misma, Juan Carlos Valsera, nace para llevar a los enfermos hasta la “Madre”. “Le presentamos a don Demetrio cuáles eran las cosas que podrían ayudar más a los enfermos y pensamos en la Madre, Lourdes”, afirmaba en una entrevista concedida a www.diocesisdecordoba.tv.
Programa
Durante los cinco días, llevaron a cabo diversas celebraciones en las que participó además el Obispo, don Demetrio Fernández. Por un lado, el primer día, los peregrinos celebraron la eucaristía en la basílica de la Inmaculada. Al día siguiente, en la basílica de San Pío X, donde además tuvieron un acto penitencial en la iglesia de santa Bernardita, para terminar por la noche con la procesión de las antorchas.
El jueves 29, asistieron a la eucaristía en la gruta, un vía crucis, catequesis y un tiempo de adoración al Santísimo; mientras que el día 30, celebraron la misa de despedida en la iglesia de Santa Bernardita, un vía crucis y una visita de despedida a la gruta nuevamente.
La peregrinación culminó el día 1 de julio con la misa en la capilla de san José.