Un año más, como cada Viernes de Dolores, la ciudad de Cartagena celebra el día de su patrona, la Virgen de la Caridad. Un día en el que miles de fieles se acercan hasta la Basílica Menor para llevar sus ofrendas, acciones de gracias y peticiones.
A las 11:30 horas comenzaba la misa en honor a la Caridad, presidida por el Obispo y en la que el alcalde, José López, ha realizado la tradicional ofrenda de la Onza de Oro, que data de 1762 y con la que el Ayuntamiento hace una aportación económica en favor de los enfermos pobres del Santo y Real Hospital de Caridad. Una ofrenda que este año alcanza los 35.000 euros.
El templo estaba abarrotado de fieles. A ellos, en su homilía, el Obispo les ha invitado a fijarse en María, madre de la caridad y de Cartagena, pues “no tenemos mejor intercesora que la Madre de Cristo, que nos conoce a cada uno”, apuntaba Mons. Lorca. “Madre, míranos con especial ternura y recibe las oraciones de todos los cartageneros que hoy quieren estar junto a ti”. Con estas palabras elevaba sus súplicas a la Santísima Virgen de la Caridad. “Bendice y protege a Cartagena”, ha añadido Mons. José Manuel Lorca, quien pedía también por los enfermos, por las víctimas de la violencia y del terrorismo, por los que han fallecido este año y por sus familiares. “Concédenos el don inestimable de la paz, la superación de todos los odios y rencores, la reconciliación de todos los hermanos; la unidad y la santidad de todas las familias”, señalaba.
El alcalde también ha dado gracias a la patrona, a la que ha llamado “Virgencica de la Caridad”, y le ha pedido por la ciudad. A la Eucaristía han asistido numerosas autoridades civiles y militares, la corte de honor del Hospital de Caridad y devotos de la Madre de Cartagena.
