“Poneos en camino” (Lc 10,3), estas palabras tomadas del Evangelio de San Lucas sirvieron al Vicario de Pastoral y del Clero, D. Manuel Pozo Oller para alentar a los sacerdotes presentes en el retiro de inicio de curso. La cita era en la casa de espiritualidad de Aguadulce el pasado 26 de Septiembre y estaban convocados todos los sacerdotes diocesanos y religiosos para orar en común y renovar ilusiones al comienzo de un nuevo año pastoral.
En sus palabras, D. Manuel recordaba a los sacerdotes la alegría de anunciar el Evangelio “allí donde el Señor nos ha puesto”, colaborando en todo momento con el ministerio episcopal. Y esa tarea debe de hacerse en fraternidad con el resto del presbiterio: “una unidad que puede considerarse como verdadera familia, en la que los vínculos no proceden de la carne o de la sangre, sino de la gracia de Dios”.
Después de la meditación hubo un tiempo largo para la oración personal ante el Santísimo, para acercarse al sacramento de la Reconciliación concluyendo con la comida compartida, expresión viva de la comunión.
