El Papa Francisco ha convocado a la Iglesia a celebrar la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación. Se trata de una Jornada nueva en la Iglesia Católica que, sin embargo, sí que se celebra en la Iglesia Ortodoxa. Y el Papa Francisco, compartiendo con el Patriarca ecuménico Bartolomé la preocupación por el futuro de la creación, ha querido que en la Iglesia Católica se celebre también esta jornada de oración y que se haga en el mismo día que en la Iglesia Ortodoxa: el 1 de septiembre.
Así, este 1 de septiembre de 201 5 será la primera vez que los católicos de todo el mundo nos unamos en oración para pedir por el cuidado de la creación, el respeto al planeta que habitamos, al que el Papa Francisco llama en su última Encíclica «la casa común». La convocatoria se ha realizado mediante una carta de Francisco a los Cardenales Turkson y Koch, presidentes respectivamente de los Pontificios Consejos Justicia y Paz y para la Promoción de la Unidad de los Cristianos. En la Diócesis de Guadix también se invita a rezar por este propósito, que manifiesta no solo respeto hacia la creación, sino también hacia el ser humano, que depende del mundo que habita y que está llamado a colaborar con Dios en la creación.
En su carta, el Papa Francisco dice que «como cristianos, queremos ofrecer nuestra contribución para superar la crisis ecológica que está viviendo la humanidad. Para ello debemos ante todo extraer de nuestro rico patrimonio espiritual las motivaciones que alimentan la pasión por el cuidado de la creación, recordando siempre que, para los creyentes en Jesucristo, Verbo de Dios hecho hombre por nosotros, «la espiritualidad no está desconectada del propio cuerpo, ni de la naturaleza o de las realidades de este mundo, sino que vive con ellas y en ellas, en comunión con todo lo que nos rodea» (ibíd., 216). La crisis ecológica nos llama por tanto a una profunda conversión espiritual: los cristianos están llamados a una «conversión ecológica».
Francisco, en su carta, ofrece tres sugerencias para la oración: la propia conciencia de colaboración en la creación, la acción de gracias por todo lo creado y la petición de perdón por los pecados cometidos contra el mundo que habitamos. Además, al ponerla en coincidencia con la misma celebración de la Iglesia Ortodoxa manifiesta su compromiso ecuménico y la invitación a que avancemos en la comunión con los hermanos ortodoxos. Así, dice el Papa que «vivimos en un tiempo en el que todos los cristianos afrontamos idénticos e importantes desafíos, y a los que debemos dar respuestas comunes, si queremos ser más creíbles y eficaces. Por esto, espero que esta Jornada pueda contar con la participación de otras Iglesias y Comunidades eclesiales y se pueda celebrar en sintonía con las iniciativas que el Consejo Ecuménico de las Iglesias promueve sobre este tema».
Desde el Secretariado de Ecumenismo de la Diócesis de Guadix se está difundiendo esta carta del Papa, así como el cartel y los textos con sugerencias para la oración, que se deberá realizar en las parroquias el martes 1 de septiembre. Esta oración comienza con una invocación al Espíritu Santo y se organiza en tres secciones de distinto carácter: alabanza a Dios por la obra de la Creación, acción de gracias a Dios por su Hijo y por la redención del mundo, y contemplación de la nueva creación prometida por Jesús. Cada sección concluye con el canto del Santo. La oración termina con el «Cántico de las criaturas» de San Francisco.
La convocatoria de esta jornada de oración se presenta cuando aún resuena el eco de la Encíclica «Laudato si» del Papa Francisco, en la que se aborda el tema del respeto al medio ambiente y al planeta que habitamos, no tanto con un sentido utilitarista cuanto como una exigencia de la propia fe.
Antonio Gómez
