

La Casa de Pastoral de Huéscar acogió, en la mañana del sábado 15 de noviembre, una convivencia vocacional destinada a los niños de catequesis, con el objetivo de despertar la vocación en los distintos estados de vida. La iniciativa, organizada por el equipo diocesano de Pastoral Vocacional en colaboración con la parroquia, reunió a más de cincuenta participantes en una jornada marcada por la oración, los juegos y la reflexión.
A partir del pasaje de Samuel —“Habla, Señor, que tu siervo escucha”—, se invitó a los niños a descubrir cómo Dios se hace presente en su día a día, subrayando la importancia de escuchar, discernir y responder con generosidad a su llamada. Durante la mañana hubo tiempos de silencio, de escucha y dinámicas lúdicas, todos en torno a la vocación, en un ambiente de alegría y participación que favoreció la convivencia entre las catequesis de la parroquia.
En la actividad participaron James Nathaniel, vicario parroquial de Huéscar, y los integrantes del equipo diocesano de Pastoral Vocacional, acompañando las propuestas y el trabajo con los grupos. Desde la parroquia de Santa María se agradece a delegado de Vocaciones, John Alexander Melo, y al equipo de Pastoral Vocacional el esfuerzo realizado para llevar a cabo la convivencia, y se invita a seguir rezando para que el Señor abra el corazón de los niños y niñas de cada comunidad, ayudándoles a descubrir que cada uno tiene una misión en el mundo.
La jornada dejó a los participantes ilusionados y con deseos de repetir la experiencia en próximas fechas.
José Antonio Martínez
Párroco de Santa María, de Huéscar

