

Con una procesión desde su templo hasta la Catedral dieron comienzo los cultos en honor de la Virgen de las Angustias, Patrona de Guadix. El traslado de la imagen tuvo lugar el domingo 2 de noviembre desde la iglesia de San Diego, en una mañana fresca que no impidió que fueran muchos los accitanos que acompañaran a su Patrona.
El traslado de la imagen desde su templo hasta la Catedral para los cultos de la septena se realiza cada año con un rosario de la aurora. Con el rezo de las estaciones, los accitanos acompañan a la Virgen con la alegría de saber que se acerca el día grande de su fiesta. Este año, ese día será el domingo 9 de noviembre, cuando, tras la Misa Pontifical y la procesión, la imagen volverá a su templo.
A la procesión asistió el obispo de Guadix, D. Francisco Jesús Orozco, quien presidió la celebración de la Misa al llegar a la Catedral. Una ceremonia marcada por la conmemoración del Día de Todos los Difuntos, celebrado cada 2 de noviembre. Por ese motivo, la Misa se ofreció por todos los fieles difuntos, encomendándolos también a la Virgen Madre.
La Virgen de las Angustias se traslada cada año a la Catedral en estas fechas para que se le celebren los cultos en su honor. Estos consisten en una septena que comenzó el mismo 2 de noviembre, por la tarde, una ofrenda floral, una Misa Pontifical y una concurrida procesión, el 9 de noviembre, que devolverá la imagen de la Patrona a su templo, donde permanece el resto del año.
Y, como marca la tradición, tras la procesión y la Misa no faltó el tradicional chocolate con churros, que este año, con el fresquito, fue especialmente bien recibido.
Antonio Gómez
Delegado diocesano de MCS. Guadix

                                    