
El día más grande del año, de esta pequeña localidad de la campiña jiennense, Villardompardo: el Corpus Christi, el Día del Señor, que con auténtico espíritu eucarístico preparan los vecinos, desde hace siglos para que el Jesús sacramentado pasee por sus calles y se detenga en los altares.
Altares alegóricos a la Eucaristía, que con primor y durante meses, preparan los vecinos de este pueblo, que suman el peso de la tradición y la gran inventiva y creatividad en la elaboración de estos altares efímeros cargados de fe.

Este año, además, el día de la Caridad ha estado marcado, providencialmente, por dos hechos. El primero, el decreto firmado por del Papa León XIV el pasado viernes, en el que reconoce como mártires a 124 jiennenses, y encabeza uno de esos procesos el que fuera párroco de esta localidad cuando fue martirizado, D. Manuel Izquierdo. El segundo, que Canal Sur retransmitiera la Misa del domingo desde la parroquia de Nuestra Señora de Gracia de la localidad, dando a Andalucía y al mundo la oportunidad de conocer lo grande en lo pequeño: cómo vive esta localidad el amor a la Eucaristía.
El encargado de presidir esta celebración fue el Provicario General, D. José Antonio Sánchez Ortiz. Autoridades locales, como la Corporación Municipal de Villardompardo y otras provinciales y autonómicas se dieron cita en la parroquia para participar de la mesa del Señor. Además de fieles de la localidad, también acudieron las representaciones de las cofradías y los niños que este año han recibido la primera comunión.
Tras la monición de entrada, leída por el alcalde del municipio, D. Francisco López Gay, dio comienzo la celebración, que en las lecturas estuvo acompañada de miembros de la comunidad parroquial y el Evangelio proclamado por el párroco, D. Ildefonso Rueda Jándula. El coro parroquial se hizo presente con sus voces en la Eucaristía.

Homilía
En el día de la Caridad, fue ésta el primer argumento que esgrimió en su homilía el Provicario General. “Este domingo celebramos la Solemnidad del Cuerpo y la Sangre del Señor. Una fiesta en la que estamos llamados a adentrarnos en el misterio de la eucaristía, en el misterio de nuestra fe. Un día para reavivar la caridad, y caer en la cuenta del lema que ha elegido Cáritas para esta solemnidad: «Mientras haya personas, hay esperanza». Y, en definitiva, un día para que, como dirá Santo Tomás de Aquino en su famoso himno eucarístico, «la lengua cante el glorioso misterio del Cuerpo y de la Sangre preciosa»”.
Del mismo modo, quiso resaltar para los que participaban en la parroquia como para los que seguían la celebración por la televisión, el profundo sentido eucarístico que arraigado a sus gentes, se hereda de generación en generación para que este día reluzca más que el sol: “El día del Corpus Christi se encuentra en el calendario litúrgico desde el siglo XIII entre las grandes festividades de la Iglesia, y por eso se celebra en todos los rincones de la tierra; pero no de la misma manera. En ciertos pueblos y ciudades, como en Villardompardo, la solemnidad del Corpus Christi adquiere un significado, un sentido y una expresión especiales. Porque hablar del Corpus Christi en la provincia de Jaén es hablar de Villardompardo”, para, asimismo profundizar en esta seña de identidad villariega: “Vosotros habéis hecho de este día vuestro sello de identidad. Así queda plasmado en la rotonda de la entrada al pueblo y, sobre todo, se respira cuando uno pasea por las calles de este pueblo y descubre el maravilloso trabajo de decoración para la procesión del Corpus Christi. Quien visita por primera vez Villardompardo en este día, se da cuenta de que el adorno de las calles es el fruto de un cuidadoso y delicado trabajo, que no ha sido improvisado, sino que se ha fraguado a fuego lento, y para el que se unido esfuerzo, dedicación y creatividad. Y todo para engalanar y engrandecer el paso del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo por sus calles.”
El Provicario General quiso enfatizar el año de la esperanza en su homilía, así como el recién firmado decreto papal que concede titulo de mártires a 124 fieles de la Diócesis, y en particular a quien decreta el proceso, el que fuera párroco de Villardompardo, D. Manuel Izquierdo Izquierdo. “Este Corpus en Villardompardo tiene la novedad de la gran noticia llegada de Roma este pasado viernes, donde el papa León XIV aprobaba la beatificación de 124 mártires en la provincia de Jaén, encabezados por D. Manuel Izquierdo, el que fuera párroco de aquí y cuya única imagen, es precisamente la de un día como hoy. En toda la Iglesia de Jaén, y de modo especial hoy, aquí, damos gracias a Dios por la vida y el ejemplo de todos estos hombres y mujeres que, arraigados en la eucaristía, no dudaron en dar testimonio de su fe mientras eran martirizados hasta la muerte”, a lo que añadió, “Celebramos este Corpus dentro del Jubileo de la Esperanza, convocado por la Iglesia para reavivar la fe, la caridad y la confianza en el Señor, en la esperanza que no defrauda. ¿Qué mayor consuelo que saber que Cristo no nos abandona, sino que se nos da cada día en la Eucaristía? En la eucaristía, nosotros encontramos la clave y el impulso para ello. Porque solo un peregrino de esperanza, que repara sus fuerzas en la eucaristía, puede continuar haciendo camino y seguir siendo portador de la esperanza que nace del Evangelio”.
MISA DE CANAL SUR DESDE VILLARDOMPARDO
D. José Antonio Sánchez Ortiz, quiso poner, de igual forma, la Palabra proclamada en el centro de su predicación, y lo hizo a través de un símil que, partiendo del texto de Lucas, sigue vigente en la actualidad de hoy y que nos lleva a la caridad evangélica: “Cristo mismo ha querido convertirse en el alimento de la multitud “en descampado”, que es lo mismo que decir “desamparados” o “desesperanzados”. Y es allí, en ese momento, cuando Jesús multiplica los panes y los peces. Es decir, Jesús mismo se multiplica como el “pan de vida”, el “pan de esperanza”. Para continuar expresando, “También, hoy son muchas las personas que se encuentra como la multitud del Evangelio. Pensemos por un momento “en los descampados” que vemos de lejos: ciudades y pueblos en guerra, campamentos de refugiados, centros de acogida de inmigrantes, cada uno de los cayucos llenos de gente que surcan nuestros mares… Pero también hay “descampados” que nos tocan de cerca: hogares destrozados por diferentes motivos, jóvenes que no tienen futuro, ancianos que viven solos, enfermos que no encuentran compasión… En ambos casos, el Señor también sigue repitiendo lo que dijo a sus discípulos: «Dadles vosotros de comer». Y es ahí donde, junto con el pan material, nosotros estamos llamados a poner el “pan de la vida” y, por tanto, “el pan de la esperanza”. Es el mismo Cristo, quien realmente puede llenar de sentido, luz y esperanza la realidad de tantas personas como sufren”.

La Eucaristía siguió, pero, en las calles, en este día del Corpus, recorriendo en procesión los altares efímeros levantados para recibir a “la esperanza que salva”. Cuando concluyó la celebración, se dio la bendición con el Santísimo y el Provicario General agradeció la acogida del párroco y del pueblo en este día grande para la localidad de Villardompardo.
Galería fotográfica: «Corpus Christi Villardompardo 2025»
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