La víspera del día de la Sagrada Familia se celebró en nuestra catedral una misa en la que un buen grupo de matrimonios renovaron sus promesas matrimoniales con motivo de sus bodas de oro, plata y primer año de casados. Organizado por la Delegación diocesana de pastoral familiar muchas familias cristianas se unieron en oración en torno a la celebración del V centenario del primer templo diocesano.
Que la familia de Nazaret interceda por todas las familias de nuestra diócesis para que seamos verdadero reflejo del Amor del Padre.