Rosario vespertino en Baza con la imagen de Nuestra Señora María Santísima de la Victoria

Dirigía el rosario el párroco de San Juan y consiliario, Emilio José Fernández Valenzuela, auxiliado por su coadjutor, Nsibiet Linus, conocido también como Don Miguel. Rosario en silencio, solo roto por el rezo la decena de avemarías y el padre nuestro de cada misterio. Con solemnidad. Cruz guía, y numerosos turiferarios, revestidos de dalmacias, que arrojaban incesantemente vaharadas de incienso, que anunciaban la cercanía de la venerada imagen de la Madre de Dios. La llevaban a buen paso, sobre sus hombros, 10 mujeres y 2 hombres, todos de negro riguroso y con la medalla de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Victoria en su pena y dolor. Cofrades, portando velas moradas. También ha querido sumarse a este acto de piedad la Hermandad de la Piedad
El momento más sentido, y más esperado, fue la “petalá”, tradición que se mantiene desde los inicios de este rosario vespertino. Al llegar al lugar más significativo de la antigua morería, en los Balcones de Palo, la imagen se para para recibir a modo de lluvia cientos de pétalos de rosas, que impregnaron de una intensa fragancia el lugar. Mientras seguía la “petalá”, Míriam y Alejandro, del grupo Kerigma, cantaban a la Madre de Dios, una de las composiciones marianas más conocidas, “Humilde Nazarena”. Ya en la Iglesia de la Merced, los devotos aplaudieron a esta Dolorosa. Después de la Santa Misa, volvió a la parroquia de San Juan.
El día 28 tendremos en Baza otro rosario vespertino en el populoso barrio de Santiago con la venerada imagen de Nuestra Señora de los Dolores. Saldrá de la parroquia a las 20:30 horas. Será una forma de despedir de la mejor manera este mes del Rosario.
José Gabriel Concepción
Baza