Quinto y último día en la Diócesis de Viseu de los “DíasD” previos a la JMJ.
Amanecía el domingo, último día que compartíamos con nuestras familias de acogimiento en los distintos pueblos de la Diócesis de Viseu, preparados para la misa en nuestras respectivas parroquias para dar gracias por estos increíbles días.
Cada familia de acogida, con sus peregrinos, asistía a la celebración de la Eucaristía en la parroquia de su pueblo. Así, las iglesias parroquiales de Viseu, se llenaban de esta alegría contagiante, arte jienense y juventud, durante toda la mañana.
Nuestro Obispo Don Sebastián presidía la Santa Misa en la Parroquia de Campo de Besteiros, compartiendo con peregrinos, jóvenes voluntarios portugueses, sacerdotes y parroquianos, el agradecimiento y la emoción de toda la Diócesis de Jaén que ha vivido estos días como autentica FAMILIA.
Tras el almuerzo, que compartíamos con nuestras familias de acogida, nos dirigíamos todos a Viseu, para la celebración de envío de todos los peregrinos que han vivido estos días previos a la JMJ en esta Diócesis. Franceses, canadienses y españoles, en concreto, de Cuenca, Bilbao y Vitoria, se unían a Jaén para prepararse y celebrar con fuerza la alegría de la Fe, a escasas horas de comenzar ¡la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa! El calor no consiguió apagar la energía de nuestra juventud, cantando a pleno pulmón y dejando claro, una vez más, que ¡Jaén está muy muy presente!
Al terminar, poníamos rumbo de nuevo a casa para la cena de despedida con nuestras familias de acogida, donde les dábamos un pequeño regalo, el oro líquido de nuestra tierra, por habernos recibido como su verdadera familia.
No tenemos palabras para expresar lo vivido en estos días en Viseu, solo podemos decir GRACIAS/OBRIGADO, y confirmar que ¡la juventud de Cristo está más viva que nunca!
Y yo me quedo con una frase de los jóvenes voluntarios portugueses: “La Fe nos asegura que, después de las sombras, hay siempre un horizonte de Luz”.
Ahora sí que sí ¡JAÉN SE VA A LISBOA!
Jóvenes de Jaén en la JMJ
