El Sr. Obispo, D. Jesús Catalá y el Vicario General, José Ferrary, viajan a Roma para participar en la Visita «Ad limina» que tiene lugar hasta el 8 de marzo. Esta visita es un encuentro de los obispos con el Obispo de Roma y un signo de comunión con el sucesor de Pedro, el papa Francisco, que se realiza cada cierto tiempo y que tiene un trabajo previo de preparación. En estos días, el Papa ha mantenido audiencias con los arzobispos de Burgos y Pamplona y los obispos de Bilbao, Osma-Soria, Palencia, Vitoria, La Calzada-Logroño, Jaca y San Sebastián.
El Sr. Obispo y el Vicario General han enviado con anterioridad a Roma un informe que se ha preparado durante los últimos meses. Se trata de un resumen de la labor pastoral de la Diócesis de Málaga desde la última Visita Ad Limina, es decir, desde el 1 de enero de 2005 al 31 de diciembre de 2013. Dicho trabajo tiene un doble objetivo: presentar un informe estadístico de la actividad de la diócesis (número de parroquias, de sacerdotes, seminaristas, asociaciones y movimientos, cofradías, congregaciones e institutos de vida religiosa…) y una síntesis de la actividad de todos los sectores que componen la vida diocesana, a través de sus distintas delegaciones; así como las prioridades pastorales para estos cursos. Pero también es un signo de comunión entre las distintas diócesis. La iglesia de Roma y el Papa toman conciencia de las diversas iglesias particulares, y la Diócesis percibe que la iglesia universal es una realidad amplia cuyo centro es Jesucristo.
Además del encuentro personal con el Papa, que constituye el momento central de la Visita, el Obispo y el Vicario General visitarán varios Dicasterios de la Curia, para abordar temas pastorales, teológicos y jurídicos. También visitarán los sepulcros de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo.
En palabras de Pablo VI, «como toda visita, se trata de un encuentro, una ocasión para hablar, para estar juntos, para intercambiar en el nombre de Cristo el beso de la paz». Es una ocasión para la comunión eclesial, la colegialidad episcopal y la caridad fraterna entre los Obispos y el Papa.
A todos los cristianos de la Diócesis se nos pide que oremos por el acontecimiento eclesial que es la Visita «Ad Limina» y por la Iglesia de Roma y el Papa; y dar gracias a Dios por este momento de comunión que se va a vivir.
