El párroco de La Inmaculada y arcipreste de La Línea de la Concepción, Juan Valenzuela, recibió, en la tarde del 18 de febrero, el título de Hijo Predilecto de la localidad linense.
Al nombramiento, que estuvo respaldado por todos los grupos políticos, asistieron numerosas personas, entre las que destacaron distintas autoridades civiles y militares de la localidad campo gibraltareña.
Juan Valenzuela tomó la palabra tras la semblanza que, sobre su persona, realizó el director espiritual del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, Juan Enrique Sánchez, y después de la intervención de la alcaldesa linense, Gemma Araujo, quien destacó el carácter conciliador, trabajador y reivindicativo del Padre Valenzuela.
El sacerdote recordó que trabaja en la ciudad desde 1965, cuando aún siendo párroco de Bolonia acudió a La Línea para participar en unas misiones que se habían establecido en San Pedro, de donde fue párroco dos años después y tras participar en la construcción de la barriada de Periáñez. Juan Valenzuela hizo un repaso por todas las actividades en las que participó: club juvenil de San Pedro, actividades de jóvenes en colaboración con otras parroquias o la formación de la primera asociación de vecinos de la ciudad, la AAVV Amanecer.
Asimismo, el arcipreste de La Línea agradeció este reconocimiento, en especial, a todos aquellos que han trabajado porque saliera adelante: «Me siento orgulloso de ser linense aunque nuestro pueblo no tenga buena prensa en España, pero siempre a donde he ido siempre he dicho que soy de La Línea para que resonara su nombre».
