“Hace unos días, un amigo me dijo que el amor es un misterio. Como la belleza. La verdad de la belleza”. No todo lo que se lee en Twitter es sucio. Hay frases providenciales que ayudan a explicar la verdad del misterio trinitario. Porque Dios es amor y misterio; verdad y belleza.
Tres personas que son un solo Dios, porque el Padre es amor, el Hijo es amor y el Espíritu es amor. Dios es todo amor y solo amor, amor purísimo, infinito y eterno. No vive en una espléndida soledad, sino que más bien es fuente inagotable de vida que se entrega y comunica incesantemente. Un viejo profesor nos enseñó que Dios Padre es el que ama, Dios Hijo el amado y Dios Espíritu Santo el amor con el que el Padre y el Hijo se aman. Pero siempre misterio de comunión, misterio familiar, misterio de vida porque todo proviene del amor, tiende al amor y se mueve impulsado por el amor.