El Catecumenado postbautismal es un tiempo de combate para hacer crecer gradualmente en nosotros la sencillez del hombre nuevo que ama a Dios como único con todo su corazón, con toda su mente, con todas sus fuerzas y al prójimo como a sí mismo. En ese combate es imprescindible el “arma” de la oración que lleva a la intimidad con Dios: “El combate espiritual de la vida nueva del cristiano es inseparable del combate de la oración”.
Durante una convivencia y siete encuentros sucesivos, los hermanos han sido iniciados a la oración del corazón y a la oración cotidiana de Laudes, a través de las catequesis sobre la oración en el Nuevo Testamento.
Ayer, y presidido por el Obispo, Don Sebastián Chico Martínez, los hermanos de la 3ª Comunidad del Centro Neocatecumenal, recibieron el Salterio y la Gracia del Bautismo para rezar y combatir en la vida cristiana.
Camino Neocatecumenal de Jaén