En el recorrido que está llevando a cabo el Obispo de Jaén, Don Sebastián Chico Martínez, los domingos de Adviento por algunas comunidades parroquiales, este domingo, IV de Adviento, por la tarde, visitó la ciudad de Martos.
Los cristianos de las cinco parroquias de la localidad y comunidades religiosas acogieron la visita de Monseñor Don Sebastián Chico Martínez, en el Santuario de Santa María de la Villa.
Con estas palabras se dirigió la Iglesia marteña a su pastor:
“El pasado 27 de noviembre, comenzando el año cristiano, Dios regaló a nuestra Diócesis un nuevo Obispo, un pastor para guiar como padre a esta Iglesia que peregrina en Jaén.
Tan solo 6 días más tarde, nos visitaba para compartir, en el Monasterio de la Santísima Trinidad, la Vigilia de oración misionera con ocasión de la festividad de San Francisco Javier.
Hoy, IV Domingo de Adviento, vuelve a estar con nosotros, presidiendo el Sagrado Banquete de la Eucaristía, memorial del Amor de Dios y signo de unión fraterna. Esta ciudad y sus cristianos le están, Sr. Obispo, profundamente agradecidos.
Una ciudad antigua y moderna, acogedora, bella, trabajadora, industrial y olivarera, comercial y deportiva, musical, viva, dinámica y… al mismo tiempo, necesitada también en sus numerosas deficiencias sociales…
Una comunidad cristiana, que hunde sus raíces en los primeros tiempos del cristianismo y que lo hace de forma ininterrumpida desde hace 800 años, pues parece ser que fue 1219 el año en que vuelve a reorganizarse la vida cristiana en esta tierra del Alto Guadalquivir.
La más de bimilenaria ciudad de Martos (Tucci se llamó) llegó a ser sede episcopal en tiempos antiguos, participando y aportando sus reflexiones y experiencias en sínodos y concilios.
Más tarde, como Iglesia perseguida, dio a sus mejores hijos, entre los que se encuentra nuestro más querido paisano: San Amador, testigo valiente y fiel del Evangelio. No faltarían numerosos mártires después.
Prácticamente desde la Reconquista y hasta la supresión de las Ordenes Militares, fue plaza fuerte de la Orden de Calatrava.
Desde hace ocho siglos, la Iglesia marteña ha vivido un tiempo ininterrumpido de vivencia pública, que ha llegado hasta nosotros y que quiere seguir caminando en, como diría Santa Teresa, los “tiempos recios”, que nos toca vivir, con los desafíos actuales, comunes en Occidente y también los propios de esta tierra…
Estamos presentes miembros de las distintas comunidades cristianas: Catequistas, Cáritas, Cofradías, Pastoral Familiar, Grupos de Mayores, Liturgia, Consagrados y Consagradas, Jóvenes Kairós, Coros, Grupos de Oración, Monaguillos, Pastoral de Enfermos, Seminaristas… que queremos seguir caminando juntos, sinodalmente, junto a nuestro padre y pastor, el Obispo Diocesano.
La cercanía de la Navidad nos recuerda que hemos de esperar al Señor como lo hicieron la Virgen María y San José”.
Fue, sin duda, un encuentro muy alegre, emotivo y entrañable, en el que el Señor Obispo animó enérgicamente a todos a seguir caminando y dando testimonio con valentía, gozo y generosidad, como la Iglesia del Señor.
Comunidades parroquiales de Martos
Galería fotográfica: «Don Sebastián visita Martos el IV domingo de Adviento»
