El presidente de la República Italiana, Sergio Mattarella, ha visitado esta tarde la Santa Iglesia Catedral, dentro del programa de su visita a Málaga con motivo de su participación en la XIV Cumbre Cotec Europa que preside el rey, Felipe VI, y a la que también ha acudido el presidente de la República Portuguesa, Marcelo Rebeso de Sousa.
Mattarella, que fue miembro de la Acción Católica y se declara católico practicante, pidió expresamente poder visitar el primer templo malagueño en el que hasta mañana jueves se encuentra instalada la exposición y veneración de imágenes «El Verbo Encarnado», organizada por la Agrupación de Cofradías de Semana Santa de Málaga con motivo de su centenario.
El presidente italiano ha sido recibido en la puerta del patio de los naranjos por el deán de la Catedral, Antonio Aguilera y tres miembros del cabildo catedralicio: Alejandro Escobar, Federico Cortés y Alejandro Pérez. Este último ha sido el encargado de la explicación del templo durante su recorrido por el mismo. En sus palabras de bienvenida, el deán ha trasladado el saludo del Obispo de Málaga, D. Jesús Catalá, que no ha podido estar presente al encontrarse en Madrid participando en la plenaria de la Conferencia Episcopal Española, y ha agradecido en su nombre la visita.
Durante el encuentro han estado presentes también el presidente y vicepresidente de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa de Málaga, Pablo Atencia y José Carlos Garín, respectivamente; así como el presidente de la Comisión del Centenario, Luis Merino, y los hermanos mayores de las distintas cofradías cuyos titulares componen la muestra organizada por la institución.
En la dedicatoria que ha dejado en el libro de honor de la Catedral, el jefe de Estado ha señalado sentirse «admirado por la extraordinaria belleza de la Catedral y el encanto de la exposición».
Tras la visita, el canónigo que ha ejercido de cicerone ha explicado que el dignatario «ha terminado encantado de nuestra Catedral. Ha dicho que verdaderamente es una obra impresionante, una «capolavoro», que quiere decir una obra maestra, diferente a otro tipo de catedrales a la que dice está más acostumbrado. Le ha llamado especialmente la atención el sistema arquitectónico, le ha gustado muchísimo. Se le notaba que tenía muchas ganas de visitar la Catedral y ha estado muy atento. La imágenes de las cofradías le han llamado mucho la atención porque es algo muy particular nuestro, y también se ha interesado por la gran obra social que realizan las hermandades».
Según el también párroco de la Santa Cruz y San Felipe Neri, al presidente «le ha llamado la atención especialmente la fachada de la Catedral, que ha dicho que es espléndida, y el coro, que es una joya. También le ha sorprendido que los dos órganos funcionen tal cual fueron concebidos, sin haber sido electrificados.
Durante su visita a la Catedral, Mattarella se ha interesado por el rico patrimonio cultural, pero sin olvidar su condición de creyente, pues al pasar delante del Sagrario ha pausado su visita y ha hecho una breve oración en silencio.
Al terminar el recorrido, el presidente ha regalado a la Catedral un grabado del Quirinal (actual palacio presidencial italiano, antigua vivienda de los papas), mientras que el presidente del Cabildo le ha hecho entrega de dos libros de la Catedral, una medalla y una ilustración del dibujante malagueño Patxi Velasco Fano, que lo representa a él visitando la basílica acompañado del niño Jesús y con la dedicatoria: «que su proyecto sea siempre el Reino de Dios (Amor y Justicia), un proyecto bellísimo e inacabado, como nuestra Catedral».
