El Arzobispo de Sevilla visitó la tarde del martes la Basílica de Ntro. Padre Jesús del Gran Poder, sede de la Hermandad del Gran Poder, donde fue recibido por el rector de la Basílica, Borja Medina, y por la junta de gobierno de la corporación de la Madrugada del Viernes Santo.
Borja Medina, como director espiritual de la hermandad, dio la bienvenida a don José Ángel, acercándole a la realidad eclesial de la misma: “La Hermandad del Gran Poder está cimentada en tres columnas fundamentales: el culto y la espiritualidad, la formación, las obras de caridad y la acción social. Todo teniendo como centro a Cristo”.
“Esta es su casa, esta es su familia, aquí será siempre recibido. Que usted nos ayude a seguir creciendo y fomentando todo lo que el Señor nos quiere entregar”, añadió Medina.
“En una época de crisis de valores cristianos, hemos entendido que la respuesta que debemos tener es una actualización de nuestra misión, e incorporar a esos pilares (espiritualidad, formación y caridad) un cuarto pilar, la evangelización, en consonancia a lo que está pidiendo la Iglesia ahora: una iglesia en camino”, explicó Félix Ríos, hermano mayor de la corporación, quien detalló a don José Ángel el proyecto de evangelización que la hermandad desarrolla en la barriada de Los Pajaritos- Candelaria.
Monseñor Saiz Meneses agradeció la acogida de los presentes, animándoles a “seguir por el camino que estáis recorriendo que es el de poner a Cristo en el centro, siguiendo sus pasos. Él nos enseña lo que es la vida real y cómo hemos de servir”.
“Vivís y lleváis a cabo la triple función de la Iglesia- añadió- cuidáis la piedad, los sacramentos, la oración; cuidáis la formación, esencial para dar razón de nuestra fe y esperanza; y cuidáis la obra caritativa y social. Os lo agradezco”.
Tras sus palabras, el arzobispo de Sevilla se dirigió al camarín del Señor del Gran Poder, donde pudo apreciar de cerca la talla de Juan de Mesa. A continuación, recorrió la Basílica y las dependencias de la casa hermandad. Finalmente, monseñor Saiz Meneses firmó en el Libro de Honor de la corporación.
Acto seguido, monseñor Saiz Meneses acudió al templo parroquial de San Lorenzo, siendo recibido por su párroco, Francisco de los Reyes, y por representantes de las hermandades allí radicadas, quienes le mostraron la riqueza patrimonial y devocional de dicha parroquia.